¿Cómo lograr una configuración de Audiófilo con un teatro en casa?

Audiófilo: Un audiófilo es un individuo que siente un gran interés por los sistemas de grabación y reproducción de sonido. Estas personas aspiran a disfrutar un audio de alta fidelidad (lo más cercano al sonido original) y calidad.

Para lograr una configuración de audiófilo, es necesario indagar sobre la ubicación y la dirección de los parlantes.

Si bien la elección de componentes de calidad es importante para cualquier configuración audiófila o de cine en casa, la colocación de los parlantes es igualmente importante para el resultado final.

La ubicación y la dirección de tus parlantes impactarán la imagen y el timbre musical, al igual que la forma de la habitación y su contenido.

En habitaciones pequeñas, que son la mayoría de los teatros en casa y salas de audio, es importante recordar que las ondas sonoras no sólo pasan directamente del parlante al oyente, también rebotan y reflejan. Dependiendo de cómo se construye la sala, el sonido de un parlante puede impactar un oyente desde varias direcciones diferentes. También, diferentes frecuencias se comportan de manera diferente en una habitación, y ambos colocación y decoración pueden mejorar o restar valor a partir del sonido. Además, el aleteo de eco debido a las superficies paralelas, puede generar problemas en habitaciones pequeñas.

Estas son las variantes que se deben tener en cuenta…

Paredes:

Si los parlantes están situados demasiado cerca a las paredes, ciertas frecuencias bajas pueden llegar a ser exageradas; estas frecuencias pueden ser dictadas por las dimensiones de una habitación. Esta es una de las razones que por lo general es recomendable no colocar los subwoofers en las esquinas. Por el contrario, si un oyente está sentado en los vacíos entre los parlantes, ciertas frecuencias de sonido se silenciarán para el oyente. Por otra parte, si los parlantes están colocados demasiado cerca de superficies reflectantes de gran tamaño, a continuación, medias y altas frecuencias pueden reflejar e interferir con el sonido que procede directamente de los parlantes.

Techos:

Los parlantes empotrados en el techo son un caso especial en la configuración de un audiófilo. Debido a que los agujeros tienen que ser cortados en los techos y muchos cables han pasar antes de estar conectados a los parlantes, conseguir la colocación correcta desde un comienzo es a la vez más difícil y más importante, y esto por lo general requiere de un profesional. El sonido se dispersa de un parlante en el techo en un patrón circular y éste variará en función de la altura del techo de la habitación. Para evitar los puntos muertos o “nulos” o diferencias de volumen del sonido, los parlantes empotrados de techo necesitan ser colocados a una distancia adecuada, de modo que el sonido se superponga. Una persona que se mueve a lo largo de la zona nunca debe sentir un hueco en el sonido. La coincidencia o superposición debe producirse precisamente a la altura de la cabeza de una persona promedio. Del mismo modo, los parlantes colocados muy juntos no se proyectan bien en estéreo.

Tríangulo Dorado:

Hace años antes de que se desarrollara el campo de la acústica en casa, muchos entusiastas de la música establecían sus sistemas mediante el uso de la regla del “triángulo de oro”, que dice que la distancia del oyente debe ser equidistante a la de sus parlantes.

Esa regla sigue siendo un buen punto de partida en la actualidad. Si los parlantes están demasiado cerca en relación con el oyente, se estrecha de sonido del sistema, mientras que si los parlantes que se colocan demasiado separados no son capaces de crear un escenario de sonido cohesivo. Por supuesto, todo esto depende del patrón de dispersión de cada parlante específico, la acústica de la sala y las preferencias de los oyentes.

TOE IN:

Otra regla de configuración se llama “Toe In.” El “Toeing in” es un método en el que los altavoces con tweeters (optimizado para reproducir el rango de sonidos agudos) direccionales están dirigidos de manera que crean una imagen estéreo comparado con apuntar los parlantes “en línea recta” para un espacio más amplio donde esté el sonido. El “Toeing in” asegura un equilibrio tonal y espacial, pero el proceso para lograr estos rasgos a menudo puede reducir la cantidad de agudos que alcanzan los oídos del oyente. Así, en algunos casos podría ser necesario dirigir, ya sea hacia adelante o incluso 60 cm más adelante del oyente, altavoces con tweeters direccionales.

Encontrar el equilibrio adecuado para una configuración de audiófilo puede ser un proceso de ensayo y error. Acústicos profesionales utilizan herramientas como medidores de nivel de presión del sonido, analizadores en tiempo real, niveles y láseres para obtener resultados perfectos.

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